...de sábado:

M: Pues ahora con tantos dolores seguro que te han mandado un montón de calmantes. ¡Qué suerte, drogas legales!
Logan: No es mucha suerte que digamos. Además prefiero no tomar nada aunque duela un poco.
M: Qué tonto eres, chaval. Por tontos prejuicios no sabes los buenos ratos que te pierdes. No tienes ni idea...
Logan: ¿Tú crees? Mira, yo en el fondo creo que te drogas por miedo.
M: Ya estamos...
Logan: No, espera, no voy a darte una charla moralizante ni nada de eso. A mí me da igual que te drogues o no. Pero sí creo entenderte. Y para que tú me entiedas a mí te voy a contar algo. Tú sabes que hoy no te va a pasar nada. Ni mañana. Ni al otro. En realidad sabes que tu vida no corre ningún peligro. No temes perderla. Y así has cambiado un miedo por otro. Tú, como la mayoría de gente de esta sociedad, ha perdido el miedo a que algo trágico pase en su vida... Y lo ha cambiado por otro miedo no menos peligroso que es de saber que no te va a pasar nada. Hemos hecho desaparecer las tragedias y ahora solo puede existir la mala suerte. Y eso da pánico porque la muerte deja de tener un sentido y la vida pasa a ser una línea plana. Por eso te drogas tú y mucha gente más; para que la inconsciencia te evite pensar en ello.
M:... ¿Y si fuera eso, que haces tú? Tú vives en mi misma sociedad, la sociedad del bienestar. Esa que ha terminado con las tragedias como tú dices.
Logan: Sí, vivo y siento las mismas cosas que tú. Esta sociedad ha eliminado muchas situaciones que antes eran tragedias. Y todos los días nos bombardean con ello para que lo tengamos en cuenta. Y es verdad que a veces tengo el mismo miedo que tú. Pero sabes, hace tiempo me di cuenta de que cuando estás en un juego con reglas ya escritas y tú bando es el perdedor, lo único que te queda es romper las dichosas reglas que nos dan, incluso las que ponen que parecen que no son reglas, echarle todas las ganas que tengas y, si pierdes, que sea por una buena causa.
M: Ya... ¿Y crees que vas a ganar?
Logan: No. Pero al menos mis miedos no serán los que nos meten otros.